Cuestionamos creencias, dogmas.  

Las píldoras, con su poliédrica canción,

vienen en forma de aforismos,

máximas y sentencias.

Sentirse libre quizá sea una superstición.  

Tal vez sea humano reconocer equivocarse.  

Puede que todo lo que des, te lo des.  

Es probable que si tienes todo lo que deseas,

es que deseas poco lo que tienes.  

La realidad es poliédrica;

 la verdad, etérea.  

Hay quien ve un poco de luz

 y se cree iluminado,  

sin apreciar cuántas máscaras

ocultan sus verdades.  

El camino hacia el horizonte

 parece recto y cercano,  

pero en realidad es curvo y lejano.  

Cuando el conocimiento

se deja obnubilar por la arrogancia,  

la sabiduría se da la espalda

y la ignorancia prevalece.

Si somos capaces

de reducir deseos y apetencias

quizás, podamos desprendernos

del vacío de nuestras quimeras,

olvidadas al despertar.